Las dietas naturales están "de moda"
Amigas Mascotas
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¿Por qué hay cada vez más gente dejando el pienso y dando comida de verdad a sus animales? Muy sencillo: al dejar el pienso sus animales mejoran en muchos sentidos… Más vitalidad, menos olor, menos picores, menos otitis, desaparece el sobrepeso, dientes blancos sin sarro, menos diarreas… Muchos problemas habituales desaparecen o mejoran enormemente. La gente está tan contenta que se animan unos a otros y esta tendencia no hace más que crecer.
Neus Candela
¿Por qué hay cada vez más gente dejando el pienso y dando comida de verdad a sus animales?
Muy sencillo: al dejar el pienso sus animales mejoran en muchos sentidos… Más vitalidad, menos olor, menos picores, menos otitis, desaparece el sobrepeso, dientes blancos sin sarro, menos diarreas… Muchos problemas habituales desaparecen o mejoran enormemente. La gente está tan contenta que se animan unos a otros y esta tendencia no hace más que crecer.
A muchos perros y gatos no les gusta el pienso o les sienta muy mal. Lo que nuestros padres o abuelos daban de comer a nuestras mascotas era mucho más sano que los piensos de hoy en día.
Sin embargo, hemos estado sometidos a un lavado de cerebro desde la época de la revolución industrial y nos han hecho creer, tanto a veterinarios como al público en general, que esas bolas hechas con sobras de la industria alimentaria (con productos tóxicos y sintéticos) son ideales para la salud de nuestras mascotas. Nada más lejos de la realidad.
Muchas veces hablando con mis clientes acabamos teniendo la misma conversación: ¡Dar de comer "comida de verdad" es simplemente una cuestión de sentido común! Eso sí, los perros y los gatos no son personas, y por lo tanto tienen requerimientos nutricionales distintos a los nuestros (consultar siempre a un especialista antes de introducir cambios en la dieta).
¿Qué pasa con los veterinarios?
Pues que somos los primeros a los que nos han lavado el cerebro. No nos han enseñado bases sólidas de nutrición durante la carrera…
Todo lo que sabemos de nutrición es: una patología, un pienso. Y ahí nos quedamos. Pocos se plantean más allá. Es más, la mayoría demonizan las dietas naturales e instauran la política del miedo de la que ellos mismos son víctimas: "¡Eso no es equilibrado! ¡¿Cómo sabes que está obteniendo todos los nutrientes?! ¡Va a coger salmonelosis! ¡Si le das huesos va a tener una obstrucción y tendremos que operar!".
Aparte de recomendar un tipo de pienso u otro, los veterinarios no tenemos más herramientas a nivel de nutrición, a no ser que hayamos decidido formarnos por nuestra cuenta.
Eso sucede por intereses comerciales. ¿Sabíais que las empresas que producen piensos son parte de los grandes monstruos de farmacéuticas y productos químicos? No sé si os habéis fijado en los supermercados que la comida de mascotas casi siempre está al lado de los productos de limpieza ¿por qué será eso? Digo yo, un poco sarcásticamente, que serán casi casi lo mismo…
Es una lástima que no haya estudios científicos publicados que prueben los beneficios de las dietas naturales, pero tal y cómo funcionan las cosas, tampoco es de extrañar... haberlos haylos.
En cambio, los hay que hablan sobre la salmonelosis y otras enfermedades infecciosas, y sobre problemas de salud como consecuencia de dietas caseras extremadamente mal hechas (lo cual me parece estupendo y necesario). Y esto es lo que recibimos los veterinarios de las fuentes oficiales, con lo cual nos invade el miedo y seguimos recomendando pienso.
Tampoco hay estudios científicos que demuestren los riesgos de dar pienso a largo plazo, otra casualidad. Los problemas de salud que dan los piensos simplemente se obvian y como consecuencia del lavado de cerebro, no entendemos que el pienso es causa de muchos problemas de salud (lo digo con total conocimiento de causa porque he estado ahí). Esto es muy fácil de comprobar porque si al dejar el pienso los problemas se van, no hacen falta artículos científicos que lo avalen.
Los miedos sobre las dietas naturales
Todos los puntos se pueden explicar y argumentar mucho más extendidamente, pero aprovecho esta oportunidad para desdramatizar el asunto:
1. Dieta equilibrada: Yo no conozco a nadie que dedique tiempo a analizar sus menús diarios, a calcular calorías, mirar la composición de los alimentos y hacer números para asegurarse de que cada día recibe todos los nutrientes conforme a las recomendaciones diarias oficiales. ¿Absurdo no? Pues parece que éste es un gran argumento en contra de las dietas naturales. El equilibrio en una dieta se obtiene respetando la biología del que lo ingiere, comiendo alimentos frescos de calidad poco procesados, asegurándose que incluye cuanta más variedad de productos posible y comiendo productos de temporada.
2. Enfermedades infecciosas: Los veterinarios ponen el grito en el cielo por este motivo y personas fanáticas de las dietas naturales obvian esto como si no fuera posible. Pues ni uno ni lo otro. Claro que al dar carne cruda hay más posibilidades de que se produzca una contaminación bacteriana importante, no se puede obviar. El pienso es comida muerta y difícilmente se contamina (aunque ha habido varias retiradas de comida comercial por este motivo). ¿Cabe la posibilidad de que nuestra mascota o incluso nosotros suframos de alguna enfermedad infecciosa? Sí ¿Es probable? No… Una cosa es que haya Salmonella en el ambiente y otra distinta coger Salmonelosis. Si no hay personas o animales immunodeprimidos y se cumplen normas de higiene fundamentales es muy improbable que se den este tipo de problemas. De todas formas, si éste es un tema que preocupa al dueño del animal en cuestión, es tan fácil como cocinar un poco la comida y se elimina este factor de riesgo (¡los huesos no!).
3. Huesos: Si se dan huesos CARNOSOS y CRUDOS adecuados al tamaño del perro o gato es poco probable que den problemas. ¿Imposible? No, como todo. Nos hemos olvidado que los perros están diseñados para comer huesos… La mayoría de perros que comen huesos de forma habitual raramente tienen problemas. Los problemas más habituales, por lo que yo he visto, son que el hueso se quede encajado en el esófago (normalmente huesos pequeños que el perro no ha tenido que trabajar) y constipaciones (normalmente en perros de presa que no mastican los huesos lo suficiente o por ingerir demasiados). Yo personalmente he visto variedad de objetos encajados en el esófago: pelotas, patata, corazones de manzana… Normalmente les ocurre a perros ansiosos. Por eso no vamos a demonizar las pelotas, patatas y manzanas ¿no? He operado muchos perros que han ingerido juguetes ¿debería recomendar que no jueguen más con juguetes? Pues no… A veces suceden cosas así. Los huesos crudos son una parte fundamental de una dieta natural en un perro o gato. Si hay reparos se pueden moler junto con la carne o dar sustitutos de los huesos. Los huesos no tienen que estar necesariamente en la dieta pero, aparte del valor nutricional que tienen, masticar y roer huesos tiene un efecto directo sobre la salud dental y emocional.
Entonces, ¿está libre de riesgos dar una dieta natural? No, pero son mínimos y se pueden minimizar aún más si se quiere.
¿Está libre de riesgos dar comida industrializada? ¡No! Me parecen muy bien las críticas a las dietas naturales pero… ¿y la alternativa qué? También tiene riesgos, y en mi opinión muchos más que los de una dieta natural bien hecha. Que no se admitan oficialmente estos problemas no quiere decir que no existan. Yo lo veo todos los días: muchas enfermedades tienen origen o empeoran debido a una alimentación nefasta.
Informarse y decidir...
Al final es cuestión de estar bien informado y elegir. Al no haber muchos estudios sobre dietas naturales bien hechas, no hay consenso sobre lo que es mejor y cada cual hace lo que mejor le parece según su propio sentido común o lo que le han dicho. Hoy en día hay varios enfoques o tendencias: BARF/ACBA (Biologically Appropriate Raw Food/Alimentación Cruda Biológicamente Adecuada), PMR (Prey Model Raw), Frankenprey, RMBD (Raw Meaty Bones Diet) y un menú ligeramente cocinado con sustituto de los huesos.
Personalmente, intento que la dieta sea lo más parecida a lo que un perro o gato comerían en su entorno natural sin caer en radicalismos (que los hay). En el caso de patologías concretas el planteamiento es distinto. Es especialmente importante que un animal que tenga un problema de salud coma bien, y yo no creo que eso sea dar el pienso o lata de prescripción de turno. Comer bien, tanto nosotros como nuestras mascotas, precisa de compromiso y un cierto esfuerzo. Olvídate de la comodidad de verter el contenido de una bolsa en el bol. Sin embargo, es maravilloso ver cómo alimentando a tu perro o gato correctamente se resuelven problemas que habían significado muchas visitas al veterinario y sentir que eres responsable del nuevo estado de salud de tu animal, de que esté más contento, de que tenga los dientes limpios, de recoger menos cacas y menos malolientes, ver cómo le brilla el pelo…
Espero que estas reflexiones te reafirmen en tu decisión de dar una dieta natural a tu mascota, que te hagan perder el miedo si te lo estás planteando o que hayan abierto un poco tu mente si nunca oíste hablar de este tema. Ya lo dijo Hipócrates en el 400 A.C., el gran médico griego, considerado como uno de los médicos más importantes e influyentes de la historia de la medicina:
“Deja que la comida sea tu medicina y la medicina tu alimento”
de Neus Candela - www.nutrivets.com
fuente: http://www.nutrivets.com/blog/2016/6/8/las-dietas-naturales-estn-de-moda
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